viernes, 12 de junio de 2009

JUDO DE TECLADO.

Como ex-judoka e informático encontrar un juego de judo que sea fiel a la realidad ha sido una grata sorpresa.
Cuando era pequeño sufrí una gran desilusión cuando llegó a mi Spectrum (en una cinta de casete de 90 minutos plagada de juegos) el patético Uchi-mata, distribuido por la casa Erbe Software. Aquello era un suplicio, con movimientos penosos, gráficos lamentables y nula jugabilidad.
Han pasado MUCHOS años y he dejado el judo, aunque sigo considerándome un aficionado, y mis múltiples achaques me recuerdan cada día los excesos de años de sobreentrenamiento.
Ahora llega a mis manos el juego para PC "David Douillet Judo"... y la cosa ha cambiado mucho.
Los movimientos son fluidos, muy naturales; la gama de técnicas de pie es amplísima y con una realización logradísima, incluyendo contras; la sensación de estar inmersos en un randori de verdad es tremenda.
El juego ofrece la posibilidad de realizar un combate "rápido" eligiendo como personaje a distintos judokas o bien jugar una serie de torneos, donde crearemos un perfil que luego iremos perfeccionando con los 'puntos de experiencia' que ganemos en los combates.
Sólo se le pueden reprochar a este fantástico juego los siguientes 'defectos':
- Es un tanto repetitivo en cuanto a oponentes. Sería grandioso poder enfrentarse a leyendas como Yasuhiro Yamashita o su eterno rival Mohamed Raswan.
- Los sonidos del público llegan a ser irritantes, por lo repetitivos.
- Falta la continuación de los combates en el suelo (mi especialidad en aquellos tiempos), sobre todo teniendo en cuenta que es un detalle poco conocido de este deporte y que esconde mucha más técnica y emoción de lo que pueda parecer, aunque sea menos vistoso.
- También se echan en falta las luxaciones y estrangulaciones (sólo aparecen juji-gatame realizada desde pie y hadaka-jime).
Como prueba de su realismo (este no es un juego de golpes acrobacias y movimientos imposibles, ni combos con magia incluida, es judo puro y duro) baste decir que con un perfil creado puedes conseguir repetir las técnicas reales que uses en el tatami. Yo usaba entonces y uso ahora uchi-mata, soto-makikomi, tai-otoshi... aunque echo en falta poder continuarlo en el suelo con hon-kesa-gatame o kuzure-kesa-gatame.
Por cierto: es casi imposible ganar por ippon directo.
¡Rei!
¡Hajime!

jueves, 11 de junio de 2009

PILOTOS DE CAZA.

Así se titula el libro editado por INÉDITA de Patrick Bishop que he terminado recientemente, muy interesante para todo aquel que se interese por el tema de la 2ª Guerra Mundial.
El principal punto a favor de esta obra es cómo está contada. No es un relato impersonal plagado de fechas, datos técnicos y demás. Esta historia se construye a partir de las cartas y diarios que dejaron los pilotos que combatieron en la Batalla de Inglaterra, y lo convierte en algo muy cercano, casi íntimo.
Junto con la narración de los hechos históricos podremos leer las impresiones de aquellos jóvenes (por mucho que Hollywood nos venda otras cosas, la gran mayoría rondaba los 20 años) que vivieron durante meses bajo la tremenda presión de tener que combatir sin descanso, contra un enemigo superior en número y experiencia.
Podremos comprobar cómo algunos veían la muerte como algo próximo e inevitable, que sólo encerraba el interrogante del cuándo y el cómo, y en ocasiones leeremos cómo algunos de ellos tuvieron tiempo para ver venir una muerte sangrienta dentro de la cabina de los Spitfire y Hurricane que pilotaban.
Algunos (pocos) sobrevivieron a aquella batalla y a la guerra, pero leeremos cómo veteranos y novatos, valientes y cobardes, a menudo desaparecían sin dejar rastro e incluso sin dar tiempo a que sus compañeros de escuadrilla pudieran saber sus nombres.

"Jamás en la historia de los conflictos humanos, tantos debieron tanto a tan pocos."
Sir Winston Leonard Spencer Churchill. Elogio a "Los chicos de los cazas" de la R.A.F.

sábado, 6 de junio de 2009

HACE 65 AÑOS...

Soldados, marineros y pilotos de la Fuerza Expedicionaria Aliada:
Estáis a punto de embarcar para la Gran Cruzada, a la que hemos dedicado todo nuestro esfuerzo durante los últimos meses. El mundo entero tiene los ojos puestos en vosotros. Las esperanzas y plegarias de todos los ciudadanos amantes de la libertad marchan con vosotros...
Vuestra misión no será nada fácil. El enemigo está bien entrenado, bien equipado y endurecido en la batalla. Combatirá sin cuartel.
¡Pero estamos en el año 1.944!...¡Es hora de que llegue el cambio! ¡Los hombres libres de todo el mundo caminan juntos hacia la Victoria!
Tengo plena confianza en vuestro coraje, devoción por el deber y destreza en la batalla. ¡No aceptaremos otra cosa que no sea la victoria completa!
¡Buena suerte! ¡Dejemos que Dios Todopoderoso nos guíe y bendiga en esta gran y noble empresa!

(Dwight D. Eisenhower. Orden del día previa a la batalla.)