lunes, 20 de agosto de 2007

Balneario.


Fin de semana haciendo la nutria/león marino.
LLegamos el viernes por la tarde al balneario de Caldas de Luna (León) y en menos de una hora ya estábamos chapoteando en la piscina termal. Después, sauna y bañera de hidromasaje, finalizando con una ducha circular.
Por la noche, una cena exquisita (servida por unos camareros que mostraban una gran profesionalidad y buen hacer) y un sueño reparador... Y es aquí donde surge el problema. Al levantarme durante la noche descubro que el plato de ducha está moteado por unos pequeños animalitos conocidos como cochinillas de la humedad. El baño de la habitación 101, donde estamos alojados está literalmente invadido por estos animalitos.
El sábado desayunamos temprano y salimos a pasear (las montañas que rodean el balneario son un paisaje fantástico y un buen lugar para practicar la escalada y el montañismo).
Después del paseo, y antes de comer, disfrutamos de otra sesión de balneario (más piscina, sauna, ducha con chorros de agua -que recuerda la cárcel, pero en plan finolis-, y como punto final... un masaje que nos dejó en la gloria). Después, una comida opípara, y una tarde tomando el sol arrullados por el sonido del río mientras se disfruta de la lectura. Como colofón para el día, otra cena deliciosa y nuevamente un sueñecito.
El domingo, después de desayunar, nos fuimos de vuelta a la realidad del mundanal ruido. Un fin de semana muy especial y, sobre todo, relajado.

Nota para los curiosos: El palabro spa que nos ha invadido últimamente (debe ser que el término balneario no es lo suficientemente exótico) proviene de una población de Lieja (Bélgica). También hay quien convierte el término en la abreviatura de Salus Per Aquam (Salud a través del agua).

No hay comentarios: