En "Bienvenidos a Metro-Centre" J.G. Ballard nos presenta un gran centro comercial del extrarradio de Londres, donde se está forjando un nuevo tipo de gobierno; un nuevo fascismo sin programa ni líderes, centrado de forma obsesiva en el consumis
mo desmedido que devora a una población aburrida y pasiva.
mo desmedido que devora a una población aburrida y pasiva.La trama es un tanto caótica, mientras acompañamos a Richard Pearson en la búsqueda del asesino de su padre, y es tal el nivel de locura que impregna a los personajes que Ballard se ve forzado a terminar el relato de una forma desmedida y totalmente alucinada.
Pero ésto, que en principio me parecía un defecto, no era sólo la única salida posible del creador por haber llevado demasiado lejos sus ideas y planteamientos, sino que me parece que es otra forma más de indicarnos la espiral autodestructiva de este fascismo que se va presentando página a página.
Pero ésto, que en principio me parecía un defecto, no era sólo la única salida posible del creador por haber llevado demasiado lejos sus ideas y planteamientos, sino que me parece que es otra forma más de indicarnos la espiral autodestructiva de este fascismo que se va presentando página a página.
"Consumo, luego existo" es el máximo corolario de esta sociedad, y Ballard avisa de lo cerca que se coloca este ideario del fascismo. Si a tí te parece que eso es muy exagerado deberías leer este libro. Yo pensaba lo mismo antes de hacerlo y ahora no estoy tan seguro.
Y después de leerlo las visitas a un centro comercial ya no serán lo mismo.
Y después de leerlo las visitas a un centro comercial ya no serán lo mismo.
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